lunes, junio 11, 2012

El Capital Intelectual de una empresa. Los cimientos del éxito.


En estos momentos, cuando hay empresas que han tenido que asumir que no venden lo que vendían y que sus ingresos han descendido. Que las posibilidades de encontrar (o mantener) clientes fiables, con capacidad financiera para aguantar los envites de la crisis, se ha convertido en casi misión imposible. Cuando los gobiernos han decidido subir impuestos o aumentar las obligaciones con la Hacienda Pública de empresas y particulares. Cuando la falta de capitalización o de crédito casi se ha convertido en un tema tabú. Justo ahora, es el momento de poner en valor nuestro punto de partida.

Para ello, deberemos averiguar cuál es el Capital Intelectual de nuestro negocio.

No podemos pensar tan solo en nuestro estado contable, ni nuestra capacidad de riesgo, ni en el gasto que significa tenerlo en marcha. Nuestras cuentas y nuestros resultados, están directamente relacionados con tener bien ponderado nuestro Capital Intelectual.

Por lo tanto, debemos contemplar dos asuntos primordiales.

En primer lugar: dónde está nuestro “mercado” hasta hoy y dónde debemos buscar nuevo mercado. Y cuantificarlo.

En segundo lugar: cuál es nuestro capital intelectual, y si con el que tenemos podremos asumir nuevos retos, o si debemos mejorarlo o cambiarlo. Y cuantificarlo.

Y ahora llegamos al punto de hablar de lo que es el Capital Intelectual: Es la multiplicación resultante del capital estructural (instalaciones, conocimientos de la empresa, maquinaria,…) del capital humano (la gente que trabaja en la empresa y el knowhow individual y colectivo) y del capital relacional (la percepción que se tiene de nuestra empresa, nuestra reputación profesional).

El Capital Intelectual es el resultado de esta operación. Y no he dicho la suma, sino la multiplicación.

Los ajustes de cualquiera de estos tres “capitales” lo lleva implícita la evolución de las empresas y de los negocios.

Ya no se puede hablar tan solo de reducciones de gastos o de empequeñecer el negocio para no gastar, ya que probablemente ese sea el inicio del final de la empresa. También se han de contemplar acciones mas valientes e imaginativas, que no conlleven al desánimo colectivo de aquellos que trabajan en ella y por lo tanto perviertan la comprensión de los cambios que se tengan que realizar.

La fortaleza del capital intelectual de una empresa, reside en tener el negocio al día. Desde las instalaciones hasta la de tener un equipo motivado que defienda la empresa contra viento y marea. Y para ello, se necesitan emprendedores con “cintura” y capacidad de liderazgo, que ilusionen con proyectos viables, conseguibles y que garanticen el futuro de la empresa.

Es la hora de echar un vistazo al Capital Intelectual.

Publicado en Business in Bajío

2 comentarios:

Héctor Chávez dijo...

Es la hora de echar un vistazo al Capital Intelectual.........
FRANCES: UN TEMA VITAL QUE NECESITA DIFUSIÓN Y MUCHA INFORMACIÓN y QUE TE COMPROMETE A SEGUIR AMPLIANDO!
Héctor Chávez Gándara
hectorchavezgandara@gmail.com

Francesc Puertas dijo...

Cierto. Hace mucho tiempo que estoy comprometido con la idea de que una empresa, mas allá de su valor contable y financiero, está su valor como en rrhh, relaciones y lo al día que tenga su estructura. Seguiré en ello. Gracias Héctor.