Sombrero 120
Diciembre 2015
Hoy he repasado todos los acontecimientos que
ocurren a mi alrededor, de amigos y conocidos que de forma indudable son
emprendedores de pro.
He observado cada uno de sus movimientos desde
hace tiempo y me permito construir una opinión al respecto, de cómo evolucionan
sus vidas profesionales.
No importa lo joven que se sea (como Ander
Aldekoa), o de mediana edad (Jordi Giné) o con canas y trayectoria (Ricardo
Nanjari), son personas con una gran dosis de curiosidad y con capacidad de
tomar decisiones constantemente.
Cada obstáculo se convierte en una nueva
experiencia y cada nuevo reto es una aventura ilusionante.
No hay nada que les interrumpa el camino.
Curiosean lo que encuentran, lo incluyen en su equipaje y dan un paso mas.
Para mi son un ejemplo constante de bien-hacer.
Pararse indefinidamente en cada obstáculo, no
aprender de éste o derrumbarse sin plantar cara a nuevos retos, les convertiría
en otra cosa que no son. No les reconocería.
Y claro, cuando se acerca el fin de año, uno se
plantea si lo que ha hecho hasta ahora es correcto y si continuar el camino
trazado les acerca mas a sus objetivos. Y analizar las respuestas y tomar
decisiones, ayuda a dar un paso mas en la buena dirección.
También es ese momento en el que has de
recordar lo que convierte cada día en una jornada estupenda.
Yo lo pongo en primera persona y confirmo que
tiene que haber una dosis proporcionada de tiempo destinado al trabajo, a
aquellos que quieres y a ti mismo.
Con estas dosis bien administradas, traces la
ruta que traces y que te conduzca a lo que quieres, será un camino mas fácil y
te conducirá al éxito.
Evidentemente en este saco de emprendedores,
podría incluir muchos mas que los citados, por tanto daros todos por aludidos.
Y llega ese momento entrañable en el que os
deseo unas Felices Fiestas y espero veros con el próximo Sombrero.
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